Pueblo Canario, 2014

Im Eingangsaal der Ausstellung im TEA, Santa Cruz (2014) gibt es eine Inszenierung mit Flachbildmonitoren auf farbigen Wänden deren Farbigkeit sich auf ortstypische Fassadenfarbigkeiten bezieht. Hier sind auf 3 Flachbildmonitoren Interventionen Bosslets in einer lebendigen Bilderfolge die zu sehen, die er in den letzten 30 Jahren auf den Kanaren und im städtischen Raum von Antwerpen, Berlin, Duisburg und Barcelona verwirklichte. Auf 4 weiteren Monitoren werden Fotografien aus Fotoreihen mit einer farblich modifizierten Vespa gezeigt die aus den 80er Jahren stammen. In einer Sitzgruppe aus schäbigen Tischen und Stühlen der 1970er Jahre können die Besucher das kürzlich erschienene 300 seitige Buch über seine interventionistischen Werke in Spanien durchblättern.



Pueblo Canario, 2014

In the entrance hall of the exhibition at TEA, Santa Cruz (2014) there is a set up with flat-screen monitors on colored walls relating to local, traditional-exterior color schemes. Here, on three flat-screen monitors one can seen what the artist has realized in the last 30 years in the Canary Islands and in the urban areas of Antwerp, Berlin, Duisburg and Barcelona. Diashows, made of photographs from the 1980s and presenting photo series with a color-modified Vespa, are projected on four monitors. In a sitting area, consisting of shabby tables and chairs from the 1970s, visitors can look through the recently published 300-pages book about his intervention works in Spain.



Pueblo Canario, 2014

En la primera sala de la exposicion en el TEA, Santa Cruz (2014) se presenta una puesta en escena de diversos monitores sobre muros pintados con los colores más habituales presentes en las fachadas tradicionales de la arquitectura popular de las Islas Canarias. En tres de los monitores se puede contemplar una sucesión de imágenes de las intervenciones que Bosslet ha realizado durante más de treinta años en Canarias, así como en las áreas metropolitanas de Amberes, Berlín, Duisburgo y Barcelona. En otros cuatro monitores, situados frente a los anteriores, se muestra una parte de las distintas series fotográficas que, realizadas durante la década de 1980, tienen como vínculo la relación entre las fachadas tradicionales, el paisaje y una moto Vespa que el autor utilizaba para desplazarse en aquellos días por la Isla y que, en el curso del trabajo, es modificada cromáticamente para trasladar la gama de los colores de las casas populares al paisaje. Hay también en esta sala un grupo de sillas y mesas rescatadas por el autor de pensiones en las que dormía en la década de 1970 en el momento de su cierre o renovación, en las que el visitante de la exposición puede sentarse para hojear el catálogo que Bosslet ha publicado recientemente sobre sus trabajos de intervención en España.